Polución lumínica
Argentina está entre los diez países con más contaminación lumínica del mundo: el 57,7% de los argentinos no puede ver las estrellas a causa de cielos nocturnos extremadamente brillantes. Así lo reveló un nuevo atlas de la contaminación lumínica elaborado por científicos de Italia, Alemania, Estados Unidos e Israel y que publicó la revista Science Advances.
La contaminación lumínica es el resplandor que se produce a causa de una excesiva emisión de luz proyectada sobre gases y partículas suspendidos en el aire. Según muestra el atlas, el 83% de la población mundial vive bajo cielos con una alta contaminación lumínica, un porcentaje que en el caso de los estadounidenses y los europeos alcanza el 99%.
El trabajo se apoya en los datos del satélite Suomi de las agencias estadounidenses NASA y NOAA, con sensores para medir la iluminación nocturna, y decenas de miles de registros tomados por científicos y voluntarios desde el interior o alrededores de las ciudades. Estos datos revelan que hasta un tercio de los humanos ya no puede ver ni siquiera la Vía Láctea.
Por países, el que tiene mayor brillo nocturno artificial en función de las personas afectadas es Singapur. Le siguen Kuwait, Qatar, Emiratos Arabes Unidos, Arabia Saudita, Corea del Sur, Israel, Argentina, Libia y Trinidad y Tobago. Los que disfrutan de cielos más limpios son Groenlandia, la isla pacífica de Niue, Somalia y Mauritania.
“Este nuevo atlas provee una documentación esencial del medio ambiente nocturno en momentos en que la tecnología de la lámpara de diodos electroluminosos (LED) se impone cada vez más en el mundo”, explicó a AFP el jefe del equipo, Falbio Falci, investigador del Instituto Italiano de la Tecnología y de la Ciencia de la Contaminación Luminosa. “Los niveles luminosos de la tecnología LED y sus colores podrían lamentablemente llevar a una duplicación o a una triplicación de la luminosidad del cielo en las noches”.
Por su parte, Chris Elvidge, del Centro Nacional para la Información Ambiental de Boulder, en Colorado, y uno de los científicos que trabajó en la elaboración del atlas, señaló que “hay generaciones enteras de personas en los Estados Unidos que nunca observaron la Vía Láctea”.
Las regiones en las que es más difícil verla son la del delta del Nilo, en Egipto; la llanura padana, al norte de Italia; la zona de Bélgica-Holanda-Alemania; Boston y Washington, en EE. UU; las ciudades inglesas de Londres, Liverpool y Leeds; y las áreas alrededor de Beijing y Hong Kong.
Los científicos lamentaron que de esta forma se ha perdido una de las principales conexiones de la humanidad con el cosmos, ya que la Vía Láctea es “un brillante río de estrellas que ha dominado el cielo nocturno y la imaginación humana desde tiempos inmemoriales”.
Fuente Pefil/Florencia Ballarino
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Energías renovables
Si Mendoza logra sumar 192 megavatios al Mercado Mayorista Eléctrico, a través de 9 proyectos basados en fuentes de energía renovable, como el sol, el viento y pequeñas turbinas en canales de riego, habrá producido 700 nuevos puestos de trabajo para los próximos dos años, con una inversión de U$S350 millones.
Además, habrá dado el primer paso para desarrollar en la provincia la producción de energías renovables, desde la construcción de los elementos como paneles solares o molinos de viento hasta la capacidad de proveer todos los servicios aledaños a estas fábricas, tarea que llevarán adelante empresas mendocinas de la industria metalmecánica.
También será el puntapié inicial para alcanzar la meta en el 2050 de producir 9.000 megavatios, ya que actualmente la provincia produce 1.400Mw, de los cuales 860 son de origen hidroeléctrico y el resto, de origen térmico.
El viernes empieza el camino hacia ese objetivo porque serán publicados los pliegos de la licitación del plan RenoVar, que presentó en mayo pasado el presidente Mauricio Macri, justamente para cambiar poco a poco la matriz energética, haciéndola más ecológica y más independiente de los hidrocarburos. En la actualidad, por ejemplo, sólo el 2% de la producción de electricidad proviene de fuentes renovables y la idea del plan nacional, es llevar ese porcentaje al 20% para el 2025.
La elección del Gobierno nacional de empezar por la diversificación de las fuentes de energía para generar electricidad no es casual, ya que responde a la urgencia de obtener mayor capacidad energética y también al compromiso tomado durante de la última Cumbre Climática celebrada en París, donde quedó establecido que serán abonados impuestos de acuerdo a la huella de carbono que provoque la fabricación de determinados bienes y productos. El 86% de la matriz primaria de producción nacional depende de los hidrocarburos, lo que implica una enorme huella de carbono.
Es por esto que el gobierno de Mendoza a través de Emesa ya empezó a trabajar sobre los posibles proyectos que competirán para integrar el RenoVar. Del tipo solar o fotovoltaico, comprenden iniciativas que serán colocadas en Luján de Cuyo, Lavalle, La Paz, General Alvear y en el PASIP de Palmira. En cuanto a los proyectos eólicos, serán instalados en El Sosneado, en dos tramos, y por último, los pequeños emprendimientos hidroeléctricos, serán instalados en el canal Cacique Guaymallén, el arroyo Las Tunas y sobre el canal San Martín, el Triple Salto y Tiburcio Benegas.
Pablo Magistocchi, director de Energía Renovable de la Provincia, detalló el proceso y explicó que la primera etapa del proyecto nacional implica la apertura de esta licitación para cubrir la generación de 1.000 megavatios, con financiamiento externo, de los cuales Mendoza competirá por generar 192 exactamente. Agregó que el 28 de setiembre está previsto que sean conocidos los ganadores de esta licitación y el 28 de octubre se firmarán los contratos para empezar a trabajar, para que "en dos años, las empresas estén operativas y puedan entregar esta cantidad de energía al sistema nacional de energía eléctrica".
Asimismo, la entrada de estos nuevos operadores al Mercado Mayorista Eléctrico implicará una modificación de la normativa que regula las compras y las ventas en este sector, por lo que los grandes usuarios podrán adquirir esta energía directamente de estos nuevos operadores, bajo la garantía de Camesa y como un cuarto garante, el Banco Mundial.
Fuente: UNO Mendoza/Carina Perez
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